miércoles, 18 de enero de 2012

Sexo

Ayer hice el amor con mi mujer.
Hoy hice el amor con mi mujer.
Huelo a sexo.
Huele a sexo mi mano azul de vientre
y huele a sexo mi mirada negra de carbón celeste.
Huelo a sexo si miro la luz de la ventana abierta
y si miro a mi mujer su mirada huele a sexo
como huele su labio vertical,
su boca de beso huele a mí.
Hoy hice el amor con el tacto blanco
de sus manos y me deje acariciar.
Hoy temblé de su olor y el mío.




6 comentarios:

HOSTAL MI LOLI dijo...

Precioso poema. De lo mejor que te he leido. Besos.

Tomás Rivero dijo...

Tienes mala memoria.
Besos.

leolo dijo...

Los de la foto más parecen sufrir que disfrutar.
El poema es buenísimo, ya lo he leído varias veces y cada vez me llega más. Pero tengo una duda con el 2ª verso "Hoy hice el mor con mi mujer" (???) cómo se hace eso?

Buen sexo, Tomás.

Isolda Wagner dijo...

Así se hace el amor, como lo descriibes, fuera de todas las corrientes, oliendo a sexo. Me ha gustado muchísimo y es la primera vez que lo leo.
Besos siempre, Tomás

Tomás Rivero dijo...

Más parecen sufrir que disfrutar, dices, Eloy. ¿Acaso no es lo mismo? Tuve una amante que lloraba de placer.

Irónica manera de que corrija un palabro. Gracias, Eloy. Voy corriendo. Pero que conste que el amor sin "a", es lo más natural del mundo: todo el mundo está buscando esa "a" que lo complemente. De ahí "mor de (por)". Así que por mor a lo bien echo, corrijo.

Un abrazo

Tomás Rivero dijo...

¿Qué va a suceder la segunda,Isolda?
Creo que a partir de la segunda lectura se nota rubor en las mejillas. Y ya nada es lo mismo.

Besos también para ti.