Si tuviera que
decir cuánto te quiero
ya no usaría los
dedos para contar los días
ni las manos
usaría para sentir tus venas.
Si tuviera que
decir cuál es mi deseo hoy
que acaba de
encenderse en el mundo
una vela, y un
barco con nombre de aire
surca las aguas
templadas del planeta
diría que estoy
solo porque nací solo
como tú naciste
sola y estas sola
o como la
humanidad no sabe
que su soledad de
todos nos duele
a ti y a mí
infinitamente.