martes, 17 de julio de 2012

Citas desinteresadas

El obrero ejemplar

La pócima Z no es una novedad tecnológica en la era de la globalización laboral, sino un antiguo secreto de las tradiciones de Haití.
Así se explica:
En la noche, las abejas alimentadas con la pócima Z clavan sus dardos en el cuerpo de alguien que duerme.
Al amanecer, el inoculado no consigue levantarse.
Al mediodía, se consume como una vela.
Al atardecer, sus queridos lo llevan, en  andas, al cementerio.
A la medianoche, el difunto abre su tumba y vuelve al mundo.
El regresado, convertido en zombi, ha perdido la pasión y la memoria. Trabaja sin horario ni salario, moliendo caña o alzando paredes o cargando leña, los ojos idos, callada la boca: no se queja jamás, ni exige nada, ni pide siquiera.
-Eduardo Galeano-