De ébano sediento está hecho el nudo magistral donde las estrellas giran. De polvo de estrellas son las ocultas maderas, que fósil esculturas, se inician bajo tierra o bajo aguas, allí donde el magno fuego se recrea, las oprime, las compacta o las reduce. Y un día, ya por fin, comparten nuestra ácida armonía, adornan, con otros ornamentos, la devastación interior.
3 comentarios:
He visto que has cambiado la foto y la he vuelto a poner en el Nido, pero no se ve muy bien, he de aprender a solucionar lo del color del fondo. Estupendas ambas la flor y la poesía. Besos. Menos mal que tu aceptas mis besos y no te me asustas jajajja.
Un beso, Loli. ¿Quien se asusta?
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