De las flores primeras del lino
extraigo templada aceite
y con él voy untando tus labios
y tu vientre
y lento como la luna
me introduzco en tu cuerpo
soy una lánguida palabra
que va deletreando tu nombre
y todo
todo para que tú
como el aceite
deslizándose lento
digas
junto a mi oído de bóvedas vaídas
que me quieres.
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