Estos loritos son de fierro, tienen la sangre curtida por el calor y el frío. Abundan y pueblan los cielos y árboles del norte argentino, sobre todo en el monte santiagueño, allí también los inviernos son duros y las heladas tremendas, sus nidos verdaderas trincheras de organización comunitaria. Si te dedicas un poco les enseñas a hablar, repiten varias palabras con fluidez y claridad, hubo loros que cantaban la Marcha peronista completa, y La Internacional, dependiendo de la ideología del profesor ja, ja, ja. Bonita foto. Un abrazo
Sí, Inés, esos son los loritos que tengo en mi parque, desde hace tres años. Debe haber unas 30 o 40 parejas. Alguien los trajo, y no se entretuvo en enseñarles a hablar, prefirió soltarlos. Creo que en la Comunidad de Madrid debe haber cien mil.
Cada vez que miro sus nidos, lo bien que enhebran las ramitas, me apetece meterme dentro, me parecen tan acogedores.
7 comentarios:
En la cima de las ramas, mirando al este, para ver al sol despuntar, nada de a media altura de quima. Eso si que es tener asientos de primera fila.
Besos
Nená
Sí,en la cima de un brote. Estos pájaros de la selva están a lo alto.
Besos, Nená.
buscan la rama frágil, desde allí contemplan las visiones más interesantes
las ramas fuertes permanecen estáticas, ellos prefieren el vaivén...donde el viento les mece, donde el viento les lleve
dos cosas no dije, las digo dos minutos después
la foto me gusta mucho, mucho
te dejo un beso Tomás
Se adaptan bien estos loritos argentinos al viento, al invierno, he incluso a lo que ven desde las quimas. Es cierto que les gusta balancearse.
Un beso, para ti también, Carmen.
Estos loritos son de fierro, tienen la sangre curtida por el calor y el frío. Abundan y pueblan los cielos y árboles del norte argentino, sobre todo en el monte santiagueño, allí también los inviernos son duros y las heladas tremendas, sus nidos verdaderas trincheras de organización comunitaria. Si te dedicas un poco les enseñas a hablar, repiten varias palabras con fluidez y claridad, hubo loros que cantaban la Marcha peronista completa, y La Internacional, dependiendo de la ideología del profesor ja, ja, ja.
Bonita foto.
Un abrazo
Sí, Inés, esos son los loritos que tengo en mi parque, desde hace tres años. Debe haber unas 30 o 40 parejas.
Alguien los trajo, y no se entretuvo en enseñarles a hablar, prefirió soltarlos. Creo que en la Comunidad de Madrid debe haber cien mil.
Cada vez que miro sus nidos, lo bien que enhebran las ramitas, me apetece meterme dentro, me parecen tan acogedores.
Un beso.
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