Tal vez no acabe nunca de hacer este poema.
-J.M. Caballero Bonald-
viernes, 28 de junio de 2013
Autonota
No, Tomás no te queda país para resistir las embestidas, se agotan los paisajes internacionales de la duda y toda la geografía del planeta es una mísera certeza.
Que no, Tomás, que certezas hay muy pocas, por fortuna. Es más, te diría que certezas, certezas, solo hay una. Por tanto, concedámonos el beneficio de la terrible esperanza y de la duda...
(Lo cierto es que me cuesta, me cuesta hasta la esperanza de la duda)
Y entonces que hago yo gritando a todo el mundo... Duda, duda, duda de todo, y de todos, duda hasta de la duda, duda de ti, duda de mi, y de lo que te digo. Te quiere Poti.
Sí, Tomás. Pero hay geografías inexplicables que recorrer, paisajes con los que concertar una embestida placentera y jugosos desconciertos más allá de esa mísera certeza.
Lo siento, Shandy, pero yo vengo de ciertas certezas que en suma siempre fueron premoniciones. Lo siento, porque tantas certezas constatan que uno está de vuelta. Y ante la duda ((democratitis (odio la confusión)) yo prefiero clavar en tierra mis estandartes (certezas). ¿La esperanza? Es un sentimiento revisionista. Para "ellos" siempre fue una oferta que hacían al que no tenía donde caerse muerto.
No lo dudo, Poti, de que nos queremos. Pero cada vez nos quedan menos cosas de las que poder dudar. Tener sentido crítico es otro cantar. Yo insisto: se agotan los paisajes internacionales de la duda.
Yo llevo conquistando la libertad desde hace cuarenta años, y al final ni los míos ni yo sabemos de qué libertad estamos hablando que cada vez somos más esclavos.
8 comentarios:
Que no, Tomás,
que certezas hay muy pocas,
por fortuna.
Es más, te diría
que certezas, certezas,
solo hay una.
Por tanto,
concedámonos el beneficio
de la terrible esperanza
y de la duda...
(Lo cierto es que me cuesta, me cuesta hasta la esperanza de la duda)
Bicos
Y entonces que hago yo gritando a todo el mundo... Duda, duda, duda de todo, y de todos, duda hasta de la duda, duda de ti, duda de mi, y de lo que te digo.
Te quiere Poti.
¡¡¡No lo dudes!!!
No sé si queda país, pero sé que queda Tomás para rato, y hay que conquistar la libertad día a día. Besos.
Sí, Tomás. Pero hay geografías inexplicables que recorrer, paisajes con los que concertar una embestida placentera y jugosos desconciertos más allá de esa mísera certeza.
Y los poemas.
Lo siento, Shandy, pero yo vengo de ciertas certezas que en suma siempre fueron premoniciones. Lo siento, porque tantas certezas constatan que uno está de vuelta. Y ante la duda ((democratitis (odio la confusión)) yo prefiero clavar en tierra mis estandartes (certezas). ¿La esperanza? Es un sentimiento revisionista. Para "ellos" siempre fue una oferta que hacían al que no tenía donde caerse muerto.
Besos.
No lo dudo, Poti, de que nos queremos. Pero cada vez nos quedan menos cosas de las que poder dudar. Tener sentido crítico es otro cantar. Yo insisto: se agotan los paisajes internacionales de la duda.
Un abrazo.
Yo llevo conquistando la libertad desde hace cuarenta años, y al final ni los míos ni yo sabemos de qué libertad estamos hablando que cada vez somos más esclavos.
Besos, Lola.
Y los poemas, dices, Eloy. Pues en este caso o el poema se expresa mal o yo he perdido toda la esperanza que nunca tuve.
Sin duda los poemas.
Abrazo.
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