viernes, 28 de noviembre de 2014

Másturbo

Para combatir el aburrimiento de una sociedad
en decadencia
me masturbo como si fuese un hombre importante
que trasciende la vida
la vida que me concedió el placer de poder disfrutar
de las pulsiones sistémicas de Onan
con una pulcritud de pañuelo de seda
que se hace depositario de mi semen
tras esta lenta y paciente caricia
que va dejando envuelta en hilos
pétalos de mi genética
un poco de ignorancia
mi perfil de enfermedades
el color de mi pelo y la forma extraña
que tengo de señalar con los ojos
los pájaros que huyen poco a poco de mi frío.

Hecho pulcra mortaja de relajado placer
vivo en una sociedad libre
que me permite poder contar
todos los momentos de soledad
por los que pasa mi vida
y recibir a cambio un abrumador
aplauso de envidias
por saber contarlo
sin morir en el quicio frontal
de un disparo de semen.

Abatido como un alce
pero con el falo aún vivo
bramo y recuerdo
mientras voy durmiéndome de placer
cuando era un niño con los ojos abiertos
por la sorpresa
de llevar dentro de mí a un hombre.



Inicio del poema

Escribía con lápiz de grafito
de afilada punta
aguzada al filo azul de la navaja
y borraba los errores del carbón
con miga de pan
sacada de una hogaza de hambre
algo de tristeza y hasta un poco
de nostalgia
al comprobar cada día
que no tener era una forma
incluso una fórmula
casi matemática
de estar en la vida.

Un poco más allá
comenzaron los desiertos.