jueves, 30 de mayo de 2013

Frontera

Al llegar a los huertos
la luz se transforma
y el color del cielo azul
es malva.
En aquellos campos regados
el agua lo endulza todo,
se oye también como crece
el canto de pájaros eternos.

En aquellos pasillos verdes
el amor se excede y gravita.
Y al traspasar la frontera,
a uno y otro lado,
la luz,
introduciendo las manos
entre frutos y flores,
achicaba los mapas
y había países
que dejaban de serlo.