martes, 31 de agosto de 2010

Hay un lenguaje roto,
un orden de las sílabas del mundo.
Descífralo.
-José Ángel Valente-

Hay un lenguaje roto
una historia escrita por extrañas sombras
figuras solitarias
otras cosas que nos son desconocidas.
Hay un orden en el desorden de la única
sílaba
que cubre el mundo
emisión de voces dicen los sinónimos
conjunto de letras
que hacen eco en el orbe
recordando que tu condición de humano
(ser poniente líquidamente gaseoso un día)
es resolutivamente catastrófica.

Vete a la luz. Marcha. Huye.
Ir como una mano sobre la geografía.
Acariciar un cántaro como un agua
soportar la sed que ocultan los barros.
Rozar el silencio de la alfarería.

Hay un orden en desorden de las cosas.
Tómalo.
Mézclate inteligente materia
que duerme en los diarios.

lunes, 30 de agosto de 2010


Plano

Yo el diferente como jamás hubo otro
el desigual y el deseado
casi único
yo el pobre hombre de ruedas melancólicas
que giran en el alma torbellino que no tengo
evocador de pinceles y de óleos
que pintan en el lienzo de mi corazón
tu ausencia: el perfil de los locos
o los ecos de esa palabra triste.

Yo el ansiado de ojos verdes y azules
de piel de cristal
de cielo y temple
pintura de Kokoschka
marea alta entre tu recogido pelo
un bote a la deriva
un mensaje en la botella
que rueda sin remite
por la mar de nadie.

Yo
dibujo el agua escribo sobre ella
siento esta brisa de la mar
y extraño aquella equis de la escuela
cuando juntaba la s y la c
y creo que fui feliz jugando al amor contigo.
Diversas sombras cruzan mi memoria
aún adolescente
vuelvo a dibujar con el humo
apago en un trazo largo
de pincel encendido
el cigarro
y sorbo del café
el final.

miércoles, 18 de agosto de 2010

Norma Jean

Recuerdo esta foto,
tenía yo esa edad tímida y difusa
velada y misteriosa
(como tus ojos de niebla)
que tenemos los hombres
que no somos nada.

Y desde entonces
ya no he vuelto a crecer,
permanezco en el tiempo
como un niño exacto y sincero,
perdido en tu mirada.

jueves, 12 de agosto de 2010

Intenciones

Tengo que cortarme el pelo,
comprarme unos pantalones vaqueros,
adelgazar diez quilos,
sufrir una transformación semejante a la del vampiro,
remar contra corriente para ascender alegres cuestas,
poner un huevo.
Tengo que domar mis instintos,
subir al cielo en ascensor,
robar un sueño para ese hombre que lleva corbata,
consolar a esa niña con tristeza de cristal,
pasarme un rato por casa de un amigo
que me invita a llorar.
Bajar a las canteras a rezar a una piedra.

martes, 10 de agosto de 2010

MECANISMO DE UN PENE

Los defenestrados, los inservibles,
los incapaces de ser útiles en esta pocilga
nos sentimos vivos estando nulos;
como ausentes somos precisos
para renuentes artificios de imaginería.

viernes, 6 de agosto de 2010

LUNA LLENA

Como esdrújulas pones imanes en tus sienes
y desde allí orienta la luna su furor de metal
los insuficientes besos que nunca quieres darle.
Inactiva se activa la palabra en tu lengua
de ella parte un tren cargado de palabras
que laxa pronuncias contra el lodo ancestral.
Tu labio leporino abierto a la maldad
oquedad entre dientes cuando el lirio blanco
fue puesto sobre tu carne fogosa y gélida.
Cercana ya la tumba una carta escribiste
con espinas celestes y perfume de rosas
contra el húmero negro que invadió tu tintero.

La muerte tiene aroma de cieno y miel
sabor a un beso dulce que no te dio nadie.

Si te mira la luna debes abandonarte.





Un país sin huellas

Para Ana Rodríguez Lago

Ya no me queda nada.
Apenas aparcado
resumo la noche,

con los ojos cerrados
voy viendo el color negro
en el fondo lejano
de un punto de luz.
Tus ojos me hacen falta
para que dentro de mí
vean
la mirada torva
de sangres irascibles,
este andamio de huesos
que quieren dirigirse sin prisas
a la duda.
Ya no me queda nada.
Una burla extranjera
va vistiendo esta carne
de pétalos de rosa
viejas canciones viejas
y ropa de arrieros.
El jabón de nadie
lavándose conmigo
y ya es nuestra la carne
que tarda en decidirse

si detrás del poema
aun puede haber alguien.

jueves, 5 de agosto de 2010

Añádase una vela al sol

Añádase una vela al sol
-César Vallejo-

Susurra el sol como una llama eterna
danzando al atardecer
y entre luces y soledad
reconoce su destino universal
de apagado solitario quemándose en la noche.

miércoles, 4 de agosto de 2010

MISTERIO

No ha de tomarse esto como se toma un tren en marcha, dijo ella. Ten calma. Bésame primero. Sigue cariño que ya te quiero. Despacio amor, que yo te dejo. Yo me dejo tocar siempre por ti, pero si quieres penetrar en mis secretos, eso sí, debes tomarme como se toma un tren en marcha.




Desembolso



Ella comenzó a desnudarse.
La braga te la quito yo, dijo él.
¿Y qué no me quitaste ya
si te doy la vida entera?
Y miró a los ojos del hombre
que allí de pié se mostraba
desamparado, inocente y solo,
despertando en ella, su apagada mirada,
una íntima e insondable tristeza.
Y generosa, volvió a darse a él

para que de nuevo le quitara.