jueves, 3 de octubre de 2013

JANIS JOPLIN. Parece que fue ayer y ya han pasado 43 años. Cuarenta y tres años mañana día 4 de octubre

Yo también necesito una mano que llevarme al rostro.
Un guante para el tacto que soliviante
el poro del por qué
esa pregunta que anda rondándome
hace tiempo
de la que se alimenta el resto de mi carne.

Mi higado de esponja empapado en olvido,
el corazón apretado en esta caja de cofre
que froté bajo el agua de lluvias y tormentas.
Este pechito blanco de enormes mostachones
estas rodillas tensas de pasos inciertos
errantes pies de siempre por calles y ventanas
y alguna que otra pérgola.

Yo también necesito un hombro nuevo
un altar de flores
un masaje de aceites y jazmines
un manojo de hierbas y provisiones
un vereda incierta que me lleve siempre
al sur.
Yo también necesito una casa
soleada de lunes de martes y de luz
y un resto de semana
de siempre que tu vengas.

Tu tribu se fue yendo, Janis
y los demás nos quedamos de traidores
contemplando tu ausencia.