lunes, 27 de abril de 2015

Cumpleaños feliz: 5 añitos

Este blog cumple cinco años. Hoy. Encontré este comentario mio en una de mis respuestas a Raúl Campos, un viejo seguidor del blog:


"Un blog no es un escaparate del Corte Inglés para mostrar las intimidades de la última moda. Un blog es una ventana abierta al debate. A la controversia. A la polémica. Y un blog es lo que su “dueño” (que asco la propiedad privada) quiera que sea. Pero no debiera. También tiene que ser lo que los demás deseen. A partir de ahí el tema a tratar será lo de menos.

¿Qué son los blog en muchísimas ocasiones? Un escaparate del ego elevado a potencias de central nuclear cuando da el pedo. Y la perdida de seguidores acojona al dueño del susodicho blog, no sea que su soledad vaya en aumento teniendo en cuenta lo triste que puede ser un blog-monologo. En este caso la alternativa sería mirarse es el espejo."


sábado, 25 de abril de 2015

Occidental el hombre

Los ríos de sangre desembocaban
en el mar de la indiferencia..
-El Roto-


Occidental el hombre se vuelve trapecista
como según qué cosa
recoge entre la hierba
diminutos insectos
carcasas y camisas
que la muda de larvas
fue dejando olvidadas
después de un desequilibrio
que nadie contempló.
Occidental el hombre jamás tuvo alas.


viernes, 24 de abril de 2015

Memoria

Cubrir aguas blancas con sábanas negras,
lavar nieve con piedra pómez
y evocar el nombre del ataúd.
Con el reverso de la mirada
grabar un breve epitafio en el cerebro,
y ya que la metáfora en estado natural
suele confundirse con la mentira
en estado artificial,
coligar el nivel de esporas
con polen de limones
sobre la negra superficie de la lápida.
Sólo así los perfumes
serán recuerdos imborrables,
fábulas de memorias inmortales.
Y si todo esto no le vale,
para evitar radiaciones,
dúchese con plomo líquido.

Y en las tumbas que no graben nombres.




domingo, 19 de abril de 2015

Tu poema no sirve para nada.

Tu poema no vale un carajo
tu poema no saca un clavo
no tiene la paciencia suficiente
para extraer una espina
sobre todo si la espina
está clavada en un esparadrapo
de tiempo y mugre
tu poema no sirve para nada
no cura
no enferma de muerte natural
no limpia esa suciedad
que llevas en la huella
digital de la cintura
sobre todo si tu cintura
es rodeada
asida y descosida
por una mano de hombre
ufano y tan nervudo
que el poema se hace trizas
mucho antes de llegar a tus caderas
tus ingles tu flor de alabastro
donde él frota un aire
de carne verde
de aceite derramándose
de pestañas muertas muriéndose
de muerte
gota
a
gota
sobre tu lengua
en la tarde o al alba
en la noche profunda
y su voz oscura.
Y tú sola con un poema
entre los muslos
que no sirve para nada.
Desnuda y estéril giras la cabeza
y él
el hombre
que trajo aquel poema
te ha dejado un bosque
entre los hombros
las ramas de un río
entre los brazos
y un papel blanco y profundo
entre los pechos tristes.

jueves, 16 de abril de 2015

Un poeta de otra tribu

Un poeta debe ser más útil
que ningún ciudadano de su tribu
-José Ángel Valente-


Al alba, cuando comienza el día,
amanece hermoso
un lunes crucial y sin sentido
que aparca en mí
y viene a darme
un golpe pequeño de paciencia,
al que yo añado
unas gotas de mi personal reserva
(lugar cerrado y protegido)
de oscuridad anónima y antigua
a la que me condena el hombre,
pues soy, amigo Valente,
un poeta de otra tribu.

Un poeta cultivando piojos
en corbatas de Nicanor Parra,
con la suficiencia perfecta
como para huir de posibles amigos
que vengan piadosos
a bendecir mi supuesto dolor.

lunes, 13 de abril de 2015

Blanco

...allende el blanco plano de la música..
-Samuel Beckett-

Te someto al blanco,
al único que dejó con posibilidad
de suciedad, Samuel Beckett;
al gris que miro y miró
aquel otro.
Te contemplo desde este blanco,
desde este único vlanco
que se hizo niebla
error
y confusión.

Te miro desde lo blanco,
como una pátina mate
que lame la mañana;
amanece
y no comprendes
que tengas un nuevo día,
como una percha de polvo
junto a tu traje
de carne macilenta y pobre,
muy pobre.

Me someto al blanco
y tiemblo
como una sábana templada.



martes, 7 de abril de 2015

Nasciturus

¿A dónde vas pétalo feliz?

Al final del vencido sendero
hay una capilla donde rezan
sólo los abatidos. Y en su amén
descansan sagrados perfumes
de otras flores acaecidas
en primaveras livianas y esenciales
que no fueron rendidas.

lunes, 6 de abril de 2015

Hombre lento, indio, náufrago, poeta

Hombre lento, indio, náufrago, poeta...
-Carmen Muñoz-

Hombre lento, indio, náufrago, poeta,
me llamaron esta tarde a punto de ser otro.
Ese otro que se recoge a meditar
y rompe anotaciones,
papeles con números o flechas
unas para arriba,
otras casi nunca,
erratas o fondos de saco,
casi siempre direcciones prohibidas
que supuestamente me dicen
adónde dirigirme dentro del poema,
y qué cantidad de papeles escritos
son importantes, fundamentales
para que el borrador acceda a original,
pero que un día, ni más ni menos azul que otro,
dejan de serlo caprichosamente,
y son un esbozo retorcido en la papelera.
Insignificantes los miro ahora,
recordando, que imprescindibles,
un día me salvaron la vida.

Me recojo a meditar.
Veo al indio en la pradera,
al náufrago sin letras,
al poeta o vate retirándose a pensar
cómo se construye un poema
que diga la verdad
para que la mentira sea cierta.
Y escribo:
del atropello mortal quedó en el suelo
una agenda, un bolígrafo negro
y unas gotas de sangre.

Del atropello mortal quedó en el aire
el nombre de un hombre y de un tiempo,
la leyenda en la que yo era un hombre lento
un indio, un náufrago, un poeta.

domingo, 5 de abril de 2015

Camino de la cruz

Desde el norte al sur, por montes de explosivos toxos en flor, desde el norte hasta Vigo, donde hice el amor, compartí amistad, y escribí un poema sobre el fuego. Desde Vigo al norte, desde el norte al sur. Desde el sur hasta Oporto, donde dejé que me besaran sobre el río Duero. Desde Oporto a Guimaraes donde me abracé a su cintura de agua y escuché poemas en la Casa Amarilla. Desde Guimaraes al norte, tras la ciudad de J.A.Valente, mi vía crucis personal de semana santificada. Mas no pienso aportar pruebas -tal vez no supe dibujar la mejor foto- ni espinas, ni flagelación, ni una gota de sangre que apacigüe mi sudor. Bebí de ella la sal y el vinagre dulce de sus labios. Nada, ninguna cicatriz, de este hermoso y ameno periplo lleno de pasión.