viernes, 17 de diciembre de 2010

Diciembre

Cuatro Pinzas

Mares del sur

Río Salado

Esta noche pasé frío

Algún día cuando yo no esté
y no pueda perdonarte,
peca con todos
pues sin mí
pecado y perdón no existen.

Peca con todos y perdona tú
mi ausencia de tránsitos y alardes.
Tal vez mi ausencia de viejo perdedor.
Los perdedores siempre hemos sido
buenas personas, eso sí,
con la condición de seguir siendo
unos perdedores.

Algún día cuando yo no esté
me gustaría quererte
como si fueras de tantos
que no fueras de nadie:
una virginidad tensa
en ese peligro
que debe alejarnos para estar cerca,
como las mareas,