martes, 16 de agosto de 2011

Ceda yo en todo


Ceda yo en todo y a ti te sobren los motivos
para amarme siéndote tan útil como un hombre
ceda también en las palabras y quédeme mudo
para siempre y tú mi boca uses para besar tu piel
ceda en el silencio y al fin un minuto de muerte
venga a subyugarme de la abstracción de la vida.

Todo me es excesivo y nada quiero.