sábado, 14 de mayo de 2011

La voz y la noche



Allá se ven iguales medusas
y acá anémonas iguales
mezcladas a la par se recombinan
y se hacen distintas,
forman nubes que a la vez son magmas
de una sombra espesa que obligada
por la luz, por la lluvia obligada,
por la voz oprimida, se hizo eco
repitiéndose en la niebla
y a solas en la niebla
la voz se hizo voz, la voz,
la incónsume,
la voz incombustible ardiendo,
la inacabada niebla
que arremete, entra y sale de tugurios
y de noches, de bares y de bocas de metros.
Y monocorde y errante
el hombre sediento
de algas y caimanes
se abraza a una sospecha,
besa a un jíbaro que vende iguanas,
se consuela disperso,
aplaude a una pareja de esqueletos
que bailan en la cálida noche
con brío de tristeza
a ritmo de cajones y tantanes.
Y después nada ni nadie
va a disponer por ellos qué manteles
qué vasos, qué sillas a su mesa
consumirán desnudos
mientras una pavesa
se posa en la ceniza de la mortecina noche
que ya es día.


6 comentarios:

HOSTAL MI LOLI dijo...

Cuantas cosas pasan en la noche,mira por donde, he soñado con una iguana que iba a servir de comida a un animal y le habían cortado dos patas para que no pudiera escapar y yo no dejaba que se la comieran ¿que significará la iguana? dime lo que significa la tuya porque igual la mía es la tuya.Besos de iguana a iguana.

Tomás Rivero dijo...

Las iguanas tenían que estar en su sitio y no en hombros de saltimbanquis. Así no soñarías con ellas. Y no hagas preguntas tan maliciosas....desde una supuesta inocencia.
Besos.

HOSTAL MI LOLI dijo...

Ahora me has abierto los ojos y veo que las iguanas pueden ser un montón de cosas. Pero debes ser tu más malicioso que yo porque yo soy inocente ,a mí que me registren.Besos de inocente a malicioso.

Tomás Rivero dijo...

Ni los sueños ni la poesía se explican. Ni otras muchas cosas. Respeta los misterios.
Un beso iguana inocente.

Carmen dijo...

este poema se ha cocinado a fuego lento, muy lento, con un algunas especias que sólo tú conoces

es una maravilla de poema, mucho más que la fotografía, aunque ésta lo acompaña como un buen vino

un beso

Tomás Rivero dijo...

La foto también me la curré, Carmen. El pájaro de la antena no se estaba quieto. Como los versos. En este poema se movían.
Un beso.