martes, 22 de febrero de 2011

Desde el círculo polar se elevó un cero

Y anida o nace un águila
en la boca secreta de tu sexo
-José Ángel Valente-

Los exentos de ti de mí o de otros
recalan en la memoria de los pájaros
y desde sus pequeños corazones
se agitan levantando un ala de niebla
en el rudimentario rostro de la ciudad
Soy un poeta ignorado que lo único
que quiero saber es que existo para saber
porque existir para saber me hace
inservible monótono innecesario
una mota de polvo en la oscuridad salvaje
de la urbe.

El día y la noche fueron reemplazados
por un silencio prolongado y líquido
el corazón del pájaro susurro
fue sustituyendo el ruido del viento
por un golpe sordo de alas desplegadas
alejándose de los hombres para siempre
Desde el círculo polar se elevó un cero.

4 comentarios:

Manolo Jiménez dijo...

Serás un poeta ignorado pero un poeta cojonudo. A mi parecer.

Abrazos.

Tomás Rivero dijo...

Se agradecen tus palabras, Manolo. Pero la poesía de hoy no necesita a poetas como yo, según parece. Y mi poesía, como toda la poesía escrita, necesita ser leída, usada; para de esta forma poder ampliar el nombre de las cosas, las emociones, los sentimientos, y hasta la política de los sentimientos.

Abrazos.

Carmen dijo...

y a mi parecer también Manolo, llevo tiempo diciéndoselo, se lo repito de vez en cuando porque se le olvida

Tomás Rivero dijo...

Se me olvida.Sí.Tal vez para empezar siempre de nuevo. Como la primera vez. Partir de cero.

Chicos, chicos...Besos