sábado, 24 de diciembre de 2011

Manos

Otras manos ruedan por el asfalto:
esta noche todo el mundo se desarma.






6 comentarios:

Nená dijo...

Estupendo matiz, señor Tomás.

Cuídese y disfrute esta noche -y todas las noches, me encantaría decir que es una orden-
Besos.

Nená

Tomás Rivero dijo...

Señora Nená, qué no. Que yo no disfruto esta noche. Todas las noches, puede. Aunque no me lo ordenes. Pero esta me deprime.
¿Sabes que es la noche con más peleas del año? Viva la familia.

Un beso.

PEN2 dijo...

Coincido plenamente contigo en lo de esta noche. Gracias por estar por aquí, te sigo más en silencio que otra cosa. No te sigo, te acompaño.

Desde mi ignorancia vital, desde mi convulsa y bloqueada existencia, interpreto que esas manos están cortadas... y no me decido a asumir que sean las de todo el mundo.

Un abrazo.

Felipe Bollaín.

Tomás Rivero dijo...

Coño! Felipe, un saludo. Gracias por acompañarme por esta ruta de poemas deslavazados.

Es cierto, no son las manos de todo el mundo.
No veo en tus palabras, esa supuesta ignorancia vital. No seas tan modesto.

Un fuerte abrazo.

PEN2 dijo...

Gracias Tomás.

No es modestia, son coletazos de mi tendencia auto-destroyer y de mi vapuleada estima. Objetivamente sé mucho más de lo que creo saber, otra cosa es el uso que hago de mi inteligencia... y otra cosa también la vida práctica... pero en fin, no sigo que me enrabieto.

Más abrazos.

Felipe.

PEN2 dijo...

ENRRABIETO!